11.11.09

Esperanza Aguirre tocada


Que Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz Gallardón no se entienden ya lo sabíamos hace tiempo. Que Doña Esperanza sueña con el puesto de “lideresa” del PP Nacional también. Que para poder encumbrarse a tan altas cotas no le importaría dar un empujoncito al Señor Rajoy para que caiga por el precipicio de la desaparición política parece bastante obvio.




Estas batallas por el poder interno en el Partido Popular no son nada nuevo, suceden en todos los partidos e, incluso diría yo, suceden en todas las organizaciones, particularmente las que desarrollan funciones públicas donde la posibilidad de formar parte de su dirección está condicionada por la consideración que de esas personas tenga lo opinión pública. Lo lamentable de todo este vodevil del PP es que la batalla por el poder se ha desarrollado en las instituciones y que se han puesto en peligro los intereses de los ciudadanos que nada tienen que ver con esas refriegas palaciegas de la Derecha.




El 3 de septiembre de 2009 pasará a la pequeña historia del PP como el día en el que su líder iba a poner los puntos sobre las íes de los barones díscolos de Valencia y Madrid que con sus luchas en los Gobiernos, los Parlamentos, las Cajas de Ahorro y otras instituciones tanto daño estaban haciendo al Partido y a los intereses de valencianos y madrileños. Si ha sido así, no tengo por menos que felicitar al Señor Rajoy, por lo que supone de reforzamiento de su liderazgo. No debemos olvidar que el sistema democrático necesita no sólo un Gobierno para el Estado sino también una oposición real y cierta con capacidad de ser alternativa para cuando los ciudadanos demanden un cambio político. También le felicito porque ha sacado el debate puramente interno del PP de los espacios donde los ciudadanos salen dañados y lo ha llevado a la calle Génova y a los órganos de dirección y disciplina de su organización. ¡Mis felicitaciones!




Los acontecimientos políticos que han sucedido en el PP el 3 de septiembre de 2009 serán motivo de mil valoraciones diferentes. Yo quisiera señalar aquí una de no poca entidad: el supermartes de Rajoy ha sido el día en el que Esperanza Aguirre ha sufrido la derrota política más grande desde que es Presidenta de Madrid. Rajoy, en el discurso que ha hecho al Comité Ejecutivo Nacional de su partido, ha dicho que “es inadmisible mover manifiestos para obligar a la gente a firmar contra mí”, en clara alusión a la recogida de firmas de alcaldes del PP que promocionó la Sra. Aguirre para pedir que se sancione a Conejal Cobo por sus declaraciones al Diario 'El País'. Mientras tanto, la Señora Presidenta de la Comunidad Autónoma, que es también Presidente del PP de Madrid, ha excusado su ausencia al Comité Ejecutivo Nacional, al parecer porque tenía que inaugurar una escuela infantil y no quería interferir en las resoluciones que se tomasen sobre el Caso Gürtel y Manuel Cobo.




Diga lo que diga la Señora Aguirre, aunque intente ahora pasar por la más férrea defensora del tocado por la mano poderosa de Señor Rajoy para presidir Caja Madrid —Rodrigo Rato—, lo cierto es que ha perdido el pulso, ha perdido la designación del candidato, ha dejado sin efecto los pactos que con unos y otros llevaba haciendo desde hace meses y ha recibido una fuerte reprimenda a su forma despótica y autoritaria de hacer política. Quizás lo único que se le puede considerar es que haya tenido, ¡de momento! la astucia política de replegarse cuando ha observado que la batalla estaba perdida, ¡que no es poco! Pero los que llevamos mucho tiempo viendo cómo evoluciona la política madrileña no recordamos derrota más grande de la Señora Aguirre, ¿será un augurio de lo que puede pasar en los próximos tiempos? Para que así sea los ciudadanos madrileños deben poder percatarse de que se han cruzado muchas rayas rojas de lo que es un comportamiento democrático y respetuoso al sistema político en la Comunidad de Madrid y, para decirlo todo, esos mismos ciudadanos deben poder visualizar una alternativa política firme, clara y con objetivos definidos para nuestra Comunidad. ¡Que lo veamos!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Esta señora por decir algo quita las pensiones a la personas impedidas 1º tardan en pagar 2º lo pagan unos meses y luego se lo retiran y lo se por mi sobrino que esta desaucido de los tres meses y a hora tiene doce años no tienen minguna ayuda la asistentas sociales no pueden hacer nada por las ordenes que les da esta señora